Los “fósiles vivientes” son animales que tienen una apariencia muy similar a sus antepasados fosilizados, manteniendo características físicas prácticamente inalteradas a lo largo de miles o incluso millones de años. A continuación se muestran siete ejemplos impresionantes:

1. **Celacanto (Latimeria)**: Este pez prehistórico fue descubierto vivo en 1938, después de haber sido considerado extinto durante millones de años. Su apariencia es prácticamente idéntica a la de los fósiles que datan de hace unos 400 millones de años.

2. **Tuátara**: Originario de Nueva Zelanda, el tuátara es un reptil que se parece mucho a los lagartos y las iguanas, pero pertenece a un linaje evolutivo distinto que se remonta a la época de los dinosaurios, hace unos 200 millones de años.

3. **Limulus (cangrejo herradura)**: aunque parece un crustáceo, el cangrejo herradura en realidad está más estrechamente relacionado con los arácnidos. Su apariencia no ha cambiado mucho en los últimos 450 millones de años.

4. **Nautilus**: Este molusco cefalópodo tiene una concha en espiral y está lejanamente emparentado con los pulpos y los calamares. Su apariencia es similar a la de los fósiles del periodo Paleozoico, hace más de 500 millones de años.

5. **Esturión**: De apariencia similar a los tiburones, los esturiones son conocidos por sus escamas óseas y por ser una de las especies de peces más antiguas, habiendo existido durante alrededor de 200 millones de años.

6. **Tortugas de caparazón blando (tortugas pigmeas y caimanes): estas tortugas tienen una apariencia que parece haber permanecido prácticamente inalterada desde la época de los dinosaurios. Su caparazón blando las distingue de otras tortugas, dándoles un aspecto más primitivo.

7. **Salamandra gigante china (Andrias davidianus)**: Este anfibio, que puede alcanzar tamaños enormes, tiene una apariencia que recuerda mucho a sus ancestros prehistóricos. Su forma y características físicas han permanecido prácticamente inalteradas durante millones de años.