Para muchas personas, el miedo a las agujas y la desagradable sensación de ser pinchados son comunes. Esto puede ser particularmente desafiante para quienes requieren medicamentos inyectables continuos, como los pacientes con diabetes insulinodependientes.

Por ello, varios científicos están explorando métodos alternativos para administrar estas sustancias. Jean-Christophe Leroux, profesor de la ETH Zurich, Suiza, innovó al desarrollar una nueva forma de administrar medicamentos inyectables a través de la mucosa oral, mediante un parche aplicado en el interior de la mejilla.

Tras algunos intentos fallidos, Leroux y su equipo encontraron la inspiración en un ser vivo: el pulpo.

El diseño de la ventosa.

En un estudio publicado en la revista Science Translational Medicine, Leroux y su equipo presentaron el prototipo del dispositivo que crearon, fabricado con ayuda de una impresora 3D. Este dispositivo se asemeja a una ventosa flexible, fijada en el interior de la boca del paciente.

Luego realizaron una prueba con voluntarios y observaron que la mayoría se adaptaba muy bien al nuevo método, prefiriéndolo a las inyecciones.

Según el investigador, la intención es crear una alternativa más cómoda a las agujas para la administración de determinados medicamentos. Leroux dice: "Hemos desarrollado un sistema de administración extremadamente simple y fácil de aplicar que podría potencialmente reemplazar las inyecciones de una variedad de medicamentos".

Inspirado en el pulpo

Jean-Christophe Leroux explica que la inspiración surgió de la capacidad de los pulpos para anclarse en ambientes marinos turbulentos. "Nuestro punto de partida fue imitar el excelente agarre de estas criaturas en superficies mojadas", explicó Leroux.

La técnica de la ventosa tiene ventajas respecto a la toma de pastillas, ya que permite administrar la medicación con el tiempo y poder retirarla cuando sea necesario. Además, evita que el medicamento se disuelva en la saliva.

Tras pruebas con perros utilizando la ventosa, se observó que los animales tenían niveles más altos del fármaco en sangre en comparación con la administración oral convencional. Leroux comenta: "Quedamos realmente impresionados con el nivel de absorción logrado con un sistema tan simple".

Sin embargo, se observó que, en animales, el método inyectable aún resultó ser más eficaz que la ventosa. Aun así, los investigadores destacan que el prototipo proporcionó mayor comodidad a los animales, permaneciendo aplicado en sus mejillas hasta tres horas sin causar problemas.

La intención de los científicos es explorar más a fondo el uso de la mucosa oral para la administración de medicamentos, especialmente en el caso de los péptidos, estructuras formadas por la conexión de dos o más moléculas de aminoácidos. Esto puede resultar especialmente beneficioso para las personas que necesitan medicamentos inyectables de forma continua.

La expectativa es que, con el tiempo, los organismos reguladores puedan aprobar nuevos métodos que eviten el uso de agujas. Según una investigación realizada por el equipo de Jean-Christophe Leroux, 75% de los cuarenta voluntarios que participaron en el experimento afirmaron no sentir molestias con la ventosa. Aproximadamente 83% expresaron su preferencia por usar este parche en lugar de la aguja.