Salud

¿Es cierto que rascarse los ojos puede provocar queratocono?

Descubra si rascarse los ojos realmente puede causar queratocono y cuáles son los riesgos.

Anuncios

Rascarse los ojos con frecuencia puede ser perjudicial para la salud ocular y puede aumentar el riesgo de desarrollar queratocono, aunque no es la única causa de este problema. El queratocono es una afección en la que la córnea, la capa transparente en la parte frontal del ojo, se vuelve más delgada y curvada de lo normal, lo que lleva a una deformación en forma de cono. Esto puede provocar visión borrosa, distorsión visual y sensibilidad a la luz.

Además de rascarse los ojos, otros factores pueden contribuir al desarrollo del queratocono, como la predisposición genética, las alergias oculares, la irritación crónica, el uso incorrecto de lentes de contacto y afecciones médicas como el síndrome de Down y el síndrome de Marfan.

Rascarse los ojos con frecuencia puede irritar la córnea y la membrana conjuntival, lo que provoca un aumento de la inflamación ocular, lo que a su vez puede contribuir al desarrollo de queratocono en personas genéticamente susceptibles. Por lo tanto, es importante evitar rascarse los ojos con frecuencia y buscar tratamiento para aliviar cualquier irritación ocular, como alergias, para reducir el riesgo de desarrollar queratocono. Si te preocupa la salud de tus ojos, siempre es recomendable consultar a un oftalmólogo para que te dé consejos específicos para tu caso.

Queratocono: origen de la enfermedad y evolución

El queratocono es una afección ocular compleja que implica el adelgazamiento y protrusión progresiva de la córnea, lo que resulta en una deformidad en forma de cono. Aunque no se comprende completamente la causa exacta del queratocono, se sabe que una combinación de factores genéticos y ambientales juega un papel importante en su origen y evolución.

1. **Factores genéticos:** Los estudios indican una fuerte predisposición genética al queratocono. Las personas con antecedentes familiares de la enfermedad tienen un riesgo significativamente mayor de desarrollarla. Se han implicado varios genes, incluidos los relacionados con la estructura y el metabolismo de la córnea.

2. **Factores ambientales y de comportamiento:** Aunque la predisposición genética es importante, varios factores ambientales y de comportamiento también pueden desempeñar un papel en el desarrollo y la progresión del queratocono. Esto incluye el hábito de rascarse los ojos con frecuencia, lo que puede provocar una irritación crónica de la córnea y contribuir al adelgazamiento progresivo.

3. **Alergias oculares:** La presencia de alergias oculares, como la conjuntivitis alérgica, puede estar asociada con el queratocono en algunos casos. La inflamación crónica resultante de las alergias puede desencadenar procesos que contribuyen al adelgazamiento y deformación de la córnea.

4. **Uso inadecuado de lentes de contacto:** El uso inadecuado o prolongado de lentes de contacto, especialmente lentes de contacto rígidos, puede aumentar el riesgo de queratocono. Esto puede ocurrir debido a la presión que ejercen las lentes sobre la córnea o a la irritación provocada por la falta de oxigenación adecuada.

5. **Traumatismo ocular:** Las lesiones oculares traumáticas también pueden desencadenar el desarrollo de queratocono en algunas personas. Aunque esto es menos común, el trauma físico en la región del ojo puede causar cambios estructurales en la córnea que conducen al queratocono.

6. **Hormonas:** Algunos estudios sugieren que las hormonas sexuales, como el estrógeno y la progesterona, pueden influir en la progresión del queratocono. Esto puede explicar en parte por qué la enfermedad tiende a progresar más rápidamente en las mujeres durante la pubertad y el embarazo.

La evolución del queratocono varía de persona a persona. En algunos casos, la progresión puede ser lenta y constante durante muchos años, mientras que en otros puede ocurrir rápidamente. El tratamiento depende de la gravedad de los síntomas y la progresión de la enfermedad y puede incluir el uso de gafas, lentes de contacto especiales, entrecruzamiento corneal y, en casos más avanzados, trasplante de córnea. El seguimiento regular con un oftalmólogo es esencial para controlar la afección y determinar el mejor curso de tratamiento.

Factores de riesgo

Varios factores de riesgo están asociados con el desarrollo y la progresión del queratocono. Éstos son algunos de los principales:

1. **Historia familiar:** Las personas con parientes cercanos que tienen queratocono tienen un mayor riesgo de desarrollar la afección. La predisposición genética juega un papel importante en la aparición de la enfermedad.

2. **Alergias oculares:** Las personas con alergias oculares, como conjuntivitis alérgica, tienen más probabilidades de desarrollar queratocono. La inflamación crónica asociada con las alergias puede provocar cambios en la estructura de la córnea.

3. **Rascarse los ojos:** El hábito de rascarse los ojos con frecuencia puede irritar la córnea y aumentar el riesgo de desarrollar queratocono. Esto puede ocurrir especialmente en personas con alergias oculares u otras afecciones que causan picazón en los ojos.

4. **Uso Incorrecto de Lentes de Contacto:** El uso prolongado de lentes de contacto, especialmente si no se usan correctamente o si no permiten una buena oxigenación de la córnea, puede aumentar el riesgo de queratocono.

5. **Traumatismo ocular:** Las lesiones oculares traumáticas, como las causadas por accidentes o cirugías oculares previas, pueden predisponer al desarrollo de queratocono en algunas personas.

6. **Condiciones médicas:** Algunas afecciones médicas, como el síndrome de Down, el síndrome de Marfan y el síndrome de Ehlers-Danlos, se asocian con un mayor riesgo de queratocono.

7. **Hormonas:** Los cambios hormonales, como los que ocurren durante la pubertad y el embarazo, pueden influir en la progresión del queratocono y provocar un rápido deterioro de la visión en algunas mujeres.

8. **Etnia:** El queratocono es más común en personas de ascendencia del Medio Oriente, el sur de Europa y el subcontinente indio. Sin embargo, puede ocurrir en cualquier grupo étnico.

9. **Edad:** Aunque el queratocono puede desarrollarse a cualquier edad, es más común que los síntomas aparezcan durante la adolescencia o la edad adulta temprana.

Es importante señalar que la presencia de uno o más factores de riesgo no garantiza el desarrollo del queratocono y muchas personas con estos factores nunca desarrollan la afección. Sin embargo, reconocer estos factores puede ayudar con la identificación temprana y el manejo adecuado del queratocono si se desarrolla. Si le preocupa el queratocono o tiene alguno de los factores de riesgo mencionados, es importante consultar a un oftalmólogo para una mayor evaluación y orientación.

Impactos del queratocono

El queratocono puede tener varios impactos en la vida de una persona, tanto físicos como emocionales. Éstos son algunos de los impactos más comunes asociados con esta condición:

1. **Visión borrosa y distorsionada:** El queratocono provoca la deformación de la córnea, lo que provoca una visión borrosa y distorsionada. Esto puede dificultar la realización de tareas cotidianas como leer, conducir y mirar televisión.

2. **Sensibilidad a la luz:** Muchas personas con queratocono experimentan una mayor sensibilidad a la luz, conocida como fotofobia. Esto puede hacer que resulte incómodo estar en ambientes muy luminosos o expuestos a la luz solar directa.

3. **Dificultad con los anteojos y lentes de contacto convencionales:** A medida que progresa el queratocono, es posible que los anteojos y lentes de contacto tradicionales ya no sean efectivos para corregir la visión. Esto puede requerir el uso de lentes de contacto especiales, como lentes rígidos permeables al gas o lentes de contacto esclerales.

4. **Impacto en las actividades diarias:** La visión comprometida por el queratocono puede afectar la capacidad de realizar actividades diarias como leer, escribir, trabajar en una computadora, cocinar e incluso reconocer rostros.

5. **Limitaciones en la participación en actividades recreativas y deportivas:** La visión comprometida por el queratocono puede limitar la participación en actividades recreativas y deportivas, como deportes de contacto, actividades al aire libre y natación.

6. **Impacto emocional:** El queratocono puede tener un impacto emocional significativo, provocando estrés, ansiedad, frustración e incluso depresión en algunas personas. Lidiar con los desafíos asociados con esta afección, como la necesidad de tratamientos frecuentes y la incertidumbre sobre el futuro de la visión, puede ser emocionalmente agotador.

7. **Impacto social y profesional:** La visión comprometida por el queratocono puede afectar las interacciones sociales y profesionales, haciendo que algunas situaciones sean incómodas o desafiantes. Esto puede incluir dificultades para comunicarse de manera efectiva, realizar presentaciones públicas o asistir a eventos sociales.

8. **Costos financieros:** El tratamiento del queratocono, que puede incluir visitas frecuentes al médico, exámenes especializados y el uso de lentes de contacto especiales, puede generar costos financieros significativos con el tiempo.

Es importante reconocer que, aunque el queratocono puede presentar desafíos importantes, existen opciones de tratamiento disponibles para ayudar a controlar la afección y mejorar la calidad de vida. El apoyo emocional, incluido el apoyo de familiares, amigos y profesionales de la salud mental, también es fundamental para afrontar los impactos emocionales del queratocono.

Tratamiento del queratocono

El tratamiento del queratocono puede variar dependiendo de la gravedad de la afección y los síntomas que presente cada paciente. A continuación se muestran algunas opciones de tratamiento comunes:

1. **Gafas o lentes de contacto especiales:** En las primeras etapas del queratocono, se pueden recetar gafas o lentes de contacto especiales, como lentes de contacto rígidas permeables al gas o lentes de contacto esclerales, para corregir la visión y mejorar la comodidad.

2. **Reticulación corneal:** La reticulación corneal es un procedimiento que implica la aplicación de riboflavina (vitamina B2) a la córnea seguida de la exposición a luz ultravioleta. Esto fortalece las fibras de colágeno en la córnea y puede ayudar a retardar o detener la progresión del queratocono.

3. **Anillos intracorneales:** Los anillos intracorneales, también conocidos como segmentos de anillos intracorneales, son pequeños implantes quirúrgicos que se colocan en la córnea para remodelar su curvatura y mejorar la visión. Estos anillos pueden ser útiles para pacientes con queratocono de moderado a avanzado que no responden adecuadamente a los anteojos o lentes de contacto.

4. **Trasplante de córnea (queratoplastia):** En casos más avanzados de queratocono, cuando otras opciones de tratamiento ya no son efectivas, puede ser necesario un trasplante de córnea. Durante este procedimiento, una parte o la totalidad de la córnea se reemplaza con tejido corneal sano de un donante compatible.

5. **Lentes de contacto esclerales especializados:** Para pacientes con queratocono avanzado o irregularidades corneales significativas, se pueden recetar lentes de contacto esclerales especiales. Estas lentes cubren toda la córnea y descansan sobre la esclerótica (la parte blanca del ojo), proporcionando una superficie de corrección más estable y cómoda.

6. **Seguimiento regular:** El queratocono es una afección progresiva, por lo tanto, es importante que los pacientes tengan un seguimiento regular con un oftalmólogo especializado para monitorear la progresión de la enfermedad y ajustar el tratamiento según sea necesario.

Además de estas opciones de tratamiento, los pacientes con queratocono también pueden beneficiarse del tratamiento de afecciones asociadas, como alergias oculares, y del apoyo emocional para afrontar los desafíos de la afección. Cada caso de queratocono es único, por lo que el tratamiento debe personalizarse para satisfacer las necesidades individuales de cada paciente. Si usted o alguien que conoce tiene queratocono, es importante consultar a un oftalmólogo especializado para evaluar y discutir las opciones de tratamiento más adecuadas.